Ye Shiwen desafía todas las convenciones
16 añitos, Ye Shiwen |
La china Ye Shiwen, de 16 años,
realizó en Londres uno de los momentos más asombrosos de la historia del
deporte. Menos importante que su fenomenal récord del mundo en los 400 metros estilos
(4.28.43 minutos) fue su último parcial en la prueba. Ye Shiwen marcó un tiempo
de 28.93 segundos en los 50
metros finales de la prueba, un parcial tan
extraordinario que mejoró el tiempo de Ryan Lochte, campeón de la misma prueba
en la categoría masculina. El último parcial del estadounidense fue de 29.10
segundos, 17 centésimas más lento que el de la jovencísima china.
Nunca en la historia de los Juegos
Olímpicos, ni en la de los Campeonatos del Mundo, una campeona ha logrado un
parcial mejor que el campeón masculino en disciplinas homologables, con una
particularidad: la marca que dio la medalla de oro a Lochte (4.05.18 minutos)
es la mejor de todos los tiempos con un bañador textil.
No son únicamente los últimos 50 metros los que
explican la impresionante demostración de Ye Shiwen. Si se toman los últimos 100 metros como medida
de comparación, Ryan Lochte cubrió el trayecto en 58.63 segundos, por 58.68 de
la nadadora china. Es decir, sólo cinco centésimas de segundo a favor de quien
muchos consideran el mejor nadador del mundo.
Récords de la época de goma
Ye Shiwen batió un récord que se antojaba imposible de mejorar. Pertenecía a la australiana Stephanie Rice desde los Juegos de Pekín 2008, con un tiempo de 4.29.45 minutos. Aquella marca estaba favorecida por el bañador de poliuretano de primera generación, el famoso plástico que aquel año, y especialmente en 2009, dieron vuelta a la tabla de récords como si fuera un calcetín.
La ayuda de los bañadores significó
que se batieran más de 100 récords del mundo en una temporada. El caos fue tan
considerable que la Federación Internacional de Natación (FINA) prohibió el uso
de bañadores de poliuretano a partir de 2010. Desde entonces, la prenda tiene
que ser de un derivado textil.
La china se convirtió en la primera
nadadora que derriba un récord mundial de la época de goma. Hasta los 300 metros , Ye Shiwen
estaba a 1.29 segundos de la marca de Rice, una diferencia que hacía
extremadamente improbable pensar en un récord del mundo. La estadounidense
Elizabeth Beisel encabezaba la prueba hasta ese momento, con 0.81 segundos de
ventaja sobre Shiwen. En los últimos 100 metros , Beisel hizo 1.02.33 minutos frente
a los 58.68 de la campeona china.
Los 400 metros estilos tiene
fama de ser la prueba más dura de la natación. Exige un esfuerzo gigantesco
porque se nadan las cuatro especialidades en un ejercicio de máxima
resistencia. Lo asombroso de Ye Shiwen es que su parcial en los últimos 100 metros es mejor que
el de Federica Pellegrini en el récord mundial de 400 metros libres:
3.59.15 minutos.
Pellegrini es la única mujer que ha
bajado de cuatro minutos en esta prueba. Estableció su récord en los Mundiales
de Roma 2009, en la barra libre del poliuretano. Favorecida por un bañador que
resultaba especialmente beneficioso en los sectores finales de las pruebas,
Pellegrini realizó un último parcial de 59.22 segundos, 0.54 segundos más lenta
que Ye Shiwen. Lo mismo ocurrió ayer con Camille Muffat, ganadora de 400 metros libres.
Ultimo parcial de 100 metros: 1.00.68 minutos, dos segundos más lenta que la
china.
Todos los datos inciden en lo
sideral del récord de Ye Shiwen, o más concretamente en el último trayecto, en
el que actúa a plomo el ácido láctico. Desafiando todas las convenciones,
incluidas la comparación con el campeón olímpico y mundial de la misma
disciplina, la adolescente china ha dejado estupefacto al mundo del deporte,
que tiembla al recordar demostraciones de este calibre en otras épocas.
(Fuente: MARCA.com)
(Fuente: MARCA.com)